Según el autor, las colas y las listas de espera son una falta
de respeto a los pacientes y no darles valor como personas.
por Antoni Gual. Jefe de servicio de la unidad de Alcohología
de la Generalitat de Catalunya. | 16/10/2017 12:35
El
otro día en el aeropuerto de Dublin la cola para pasar seguridad superaba las
500 personas. Hacemos cola para que comprueben que no llevamos bombas, y
paradójicamente un terrorista inteligente simplemente tendría que ponerse en
esa cola para explosionar su maleta y generar una masacre mucho mayor que si
explotara en pleno vuelo. Las colas son en ocasiones estúpidas, a veces
evitables, pero casi siempre son una muestra de falta de respeto hacia el
usuario, el cliente o en nuestro caso el paciente.
Si
uno se fija, en los hospitales hay colas, en los ambulatorios hay colas, y
después de las colas reales también existen las colas virtuales: las listas
de espera. Cuando generamos una cola, es porque damos más valor al
tiempo de nuestros profesionales que al tiempo de nuestros pacientes. Hay
una excepción: la cola del comedor del hospital. Siempre he pensado que un
hospital que provoca largas colas en el comedor de empresa da muy poco valor al
tiempo de sus profesionales.
Pero
volviendo a los pacientes, no dar valor a su tiempo es no darles valor como
personas, es no respetarlos, y esa falta de respeto ni es de recibo ni
facilita que el paciente entre a la consulta con buena disposición y dispuesto
a colaborar.
Leer más y fuente:
http://www.diariomedico.com/opinion-participacion/opinion/antoni-gual/el-que-espera-desespera
OBSERVACIÓN: El contenido de la información ha sido obtenida mediante un sistema de búsqueda en Internet. Su titularidad corresponde a la Web de origen salvo lo dispuesto en la misma. Cualquier, comentario, duda, aclaración o errata que observe le rogamos nos lo comunique a través de sosictus@gmail.com. Gracias
No hay comentarios:
Publicar un comentario