Buscar este blog

viernes, 27 de mayo de 2016

EN CASA CON ENFERMEDAD AMBIENTAL

GUÍA PARA MEJORAR EL AMBIENTE DE SU HOGAR

Este documento es para ayudar a la gente con sensibilidad y con sensibilidad química y a sus familias, a mejorar su salud haciendo cambios eficaces en su entorno vital.

Cuando se han diagnosticado enfermedad ambiental, sensibilidad química o exposición a pesticidas, es necesario hacer algunos cambios en el estilo de vida para reducir la exposición innecesaria a  químicos: humos, gases de escape, disolventes y partículas inhalantes como polvo o polen.
Normalmente es necesario reducir la exposición repetida a ciertos alimentos mediante la dieta rotatoria, que consiste en comer sólo una vez cada cuatro días alimentos que pertenezcan a una misma familia alimenticia. Esta rotación permite al cuerpo recuperarse de las posibles reacciones a  cualquiera de los alimentos ingeridos antes de exponerse de nuevo a una sustancia detonante.
Todos los afectados de enfermedad ambiental tienen deficiencias nutricionales, de vitaminas, minerales, aminoácidos o ácidos grasos esenciales (AGEs), como consecuencia de un aumento de las necesidades, aumento de las pérdidas o a la pobre absorción de nutrientes.
Al objeto de solucionar estas deficiencias, se prescribe una dieta variada con suplementos dietéticos.
Los alimentos ecológicos son muy recomendables porque los residuos químicos presentes en los alimentos tratados pueden provocar síntomas en los afectados de enfermedad ambiental. Cuando sea posible, se aconseja consumir sólo alimentos frescos, lo que ayuda a evitar aditivos e ingredientes "ocultos" comunes en los alimentos elaborados industrialmente. Los suplementos nutricionales deberían ser preparados hipoalergénicos de buena calidad.
Así como es deseable la comida "limpia", también lo es el agua limpia y se recomienda el agua mineral embotellada o el agua corriente filtrada.
Es mejor filtrar el agua según entra en la casa y hay disponibles diferentes sistemas de filtración. La Fundación puede facilitarles más información sobre empresas adecuadas así como de otros artículos que ayudan a la gente con sensibilidad química.
Se debe evitar el aire contaminado, existen filtros que purifican el aire de interior liberándolo de químicos y partículas. La filtración de aire es particularmente útil en el dormitorio donde se pasa un tercio del tiempo. Existen filtros para coches, que funcionan con el enchufe del mechero.
En el hogar, es aconsejable reducir  todo lo posible la exposición a químicos.
Cuanto más nueva sea la sustancia o artículo, más probable es que emita químicos.
En general, todo producto con aroma, está emitiendo químicos. Sin embargo, el hecho de que no haya olor no significa que no haya emisión.
Los materiales  más adecuados para uso de los pacientes con enfermedad ambiental son el vidrio, la cerámica, el algodón o la seda no tratados, así como la madera igualmente sin tratamiento previo. Hay disponible en el mercado para gente con sensibilidad química pinturas, barnices, productos de limpieza o de aseo no tóxicas.
El cambio del estilo de vida es una parte importante del tratamiento de la enfermedad ambiental.
El Centro recomienda el enfoque holístico para mejorar su ambiente, así como las vacunas de inmunoterapia a dosis bajas y la corrección recomendada de los déficits nutricionales .Asegurar estos cambios e identificar otros problemas médicos son la base de la recuperación. El grado de rectificación depende de la gravedad de la enfermedad. 
Emiten sustancias químicas
Tejidos, aglomerado, contrachapado, tablero DM, conservantes de la madera, moquetas, pinturas y derivados, barnices, cera, productos de limpieza, desinfectantes, electrodomésticos de gas, cosméticos, material y equipamiento de oficinas, humo de tabaco, ropa limpiada en seco, ambientadores y combustibles almacenados.
El salón
La gente con sensibilidad  debe intentar mantener el salón limpio, luminoso y bien ventilado. Es muy importante la elección del mobiliario, revestimientos del suelo y del techo para conseguir una reducción en la carga tóxica.
En esta sección veremos qué muebles y enseres pueden cambiarse para mejorar las condiciones ambientales de su salón.
Ventilación
Si el aire exterior de su domicilio es de buena calidad, la ventilación cruzada a través de puertas y ventanas puede ser un buen método de ventilar la vivienda. Se pueden usar pantallas filtro, o ventiladores con filtro empotrado para impedir el paso del polen.
Son útiles también los purificadores o limpiadores de aire si éste es de mala calidad, o especialmente en la época del polen. Estos aparatos filtran el aire, eliminando las partículas de polvo, alérgenos de mascota, olores y humos, devolviendo el aire más limpio al salón.
Los filtros deben mantenerse adecuadamente, limpiándolos y reemplazándolos cuando indique el fabricante.
Para mejorar la calidad del aire se pueden asociar ionizadores al filtro. Ayudan a atrapar partículas del aire emitiendo electrones que unidos a las moléculas del aire forman iones. Estos iones con carga eléctrica negativa se diseminan por la habitación donde se unen con el polvo, polen, humo, escamas de animales para formar partículas más grandes que pueden ser atrapadas más fácilmente por los filtros limpiadores. Es muy importante que ionizadores  y  filtros no necesiten cambiarse y que se aspire y limpie el polvo regularmente para eliminar las partículas más grandes.
Donde la condensación sea un problema, un deshumidificador puede ser una buena inversión. Al eliminar los vapores de agua del aire, se reducen las partículas flotantes y hongos.
Leer más y fuente:
http://www.fundacion-alborada.org/component/content/article/106-recomendaciones/recursos/223-guia-para-mejorar-el-hogar
OBSERVACIÓN: La información ofrecida ha sido obtenida mediante un sistema de búsqueda en Internet. Su titularidad corresponde a la Web de origen salvo lo dispuesto en la misma. Cualquier, comentario, duda, aclaración o errata que observe le rogamos nos lo comunique a través de sosictus@gmail.com. Gracias

No hay comentarios: